lunes, 27 de abril de 2015

MUERTE EN EL MEDITERRANEO



He quedado profundamente impresionado por los 700 migrantes que murieron ahogados en las aguas del Mediterráneo. Escapaban de la miseria, buscando desesperadamente trabajo en otro continente. Su muerte demuestra que se siguen  levantando barreras cada vez más altas y sólidas entre las tierras de los incluidos y los excluidos.
En un mundo cada vez más sofisticado y con riquezas materiales e inmateriales infinitas, barcos cargados de mano de obra barata cruzan las aguas del Mediterráneo, recordando otros barcos que hace solo pocos siglos atrás llevaban esclavos de Africa a nuestra América.  

¿Como ve un europeo – defensor de los derechos humanos – esta  tragedia?
Encontramos respuestas en la entrevista que el diario argentino Pagina 12 ha hecho a Michael Sommer, 63 años, quien presidió de 2010 a 2014 la Confederación Sindical Internacional (la central sindical más importante del mundo).
 –¿Cómo miden los sindicatos alemanes el impacto de los últimos muertos en el Mediterráneo mientras trataban de llegar a Europa desde el norte de Africa?
–El impacto fue menor por un hecho que obviamente no debe celebrarse: se trata de la tercera gran ola migratoria de las que son consecuencia indirecta de la intervención norteamericana en la región. Los migrantes que se embarcan huyen de la guerra civil en Siria. O del desmembramiento de Libia. O de la pobreza extrema en el continente africano. Es una mezcla de razones políticas y de pobreza. En África central también hay movimientos migratorios de los que huyen en forma masiva. Los europeos pensaron durante mucho tiempo que estaban “protegidos”, y lo digo entre comillas, por el mar. El caso de Alemania es geográficamente especial porque al no tener costas en el Mediterráneo la llegada de los migrantes se producía de otro modo.
–Pero además de la gran ola turca, que ya es un fenómeno antiguo y sobre todo económico, llegan refugiados.
–Sí, y se producen conflictos sociales que justamente son alentados por la extrema derecha. Ante este aliento los sindicatos socialdemócratas son unívocos en sus declaraciones. Se unen para opinar que los refugiados tienen un derecho. El derecho de que nosotros los acojamos y protejamos. En el siglo pasado hubo muchísimos alemanes que tuvieron la suerte de lograr que otros países los refugiaran. Por lo tanto en este sentido hay una obligación moral de acoger y de no cerrar las fronteras. Eso más allá de que no sea un problema financiero, porque Alemania cuenta con los recursos para hacerlo. Estamos muy a favor de que las intervenciones en el Mediterráneo para salvar a los refugiados de la muerte sean reforzadas sustancialmente. No debe haber un muerto más. Por otro lado tenemos que lograr que se combatan las causas de estas corrientes migratorias. No hablo de combatir a los refugiados sino a los motivos económicos y políticos que provocan la emigración.
–¿Cuál sería la forma de combate a las causas de la migración masiva?
–Primero una ayuda de carácter económico y asistencia humanitaria en aquellos lugares donde hay guerra civil. Incluso hay que dar apoyo a los países que acogen refugiados, como Jordania, porque en algún momento no lo van a poder soportar. Debemos desplegar una política que no caldee más los conflictos sino que contribuya a una solución. Muchas veces escucho en Europa que se elevan reclamos en favor de soluciones militares. Es increíble. Aprendamos de nosotros mismos. Por primera vez en la historia llevamos 60 o 70 años de paz. Por primera vez no se dirimen conflictos con medios militares sino con instrumentos humanitarios, económicos y sociales. Estoy orgulloso de poder decir que hay movimientos de derecha que pueden ver distinto lo que estoy diciendo pero que en Alemania esos movimientos no tienen ninguna oportunidad de triunfar con su propuesta.
(Autor del reportaje: Martín Granovsky; "Página 12", Buenos Aires, 26 de abril de 2015)

domingo, 19 de abril de 2015

Un Paraninfo desbordado



            Un Paraninfo desbordado, como nunca lo había visto, fue el entorno de la convocatoria que realizó el Centro de Estudiantes de Derecho el jueves pasado, sobre el tema “Las Relaciones Laborales en el Uruguay de hoy”.  
           
 

La jornada se concentró en un panel en el que participaron el Rector de la Universidad, Roberto Markarian, el Ministro de Trabajo y Seguridad Social Ernesto Murro, el Director de Cinterfor-OIT Enrique Deibe, el Consejero estudiantil Agustín Cedrés y el suscrito, en su calidad de Director del Instituto de Derecho del Trabajo.


Los expositores marcaron la importancia de la disciplina de relaciones laborales en el contexto actual del Uruguay. En particular el Ministro Murro destacó la retroalimentación que existe entre el modelo uruguayo actual de relaciones laborales, con gran participación de los actores sociales a través de la negociación en los Consejos de salarios, y la necesidad de formar profesionales de la Licenciatura de RRLL. El Ministro también hizo hincapié en la posibilidad de desarrollar pasantías de estudiantes avanzados en el propio Ministerio, y señaló que es importante que la experiencia se extienda también al Interior del país para que los estudiantes de otros Departamentos puedan tener experiencias en las Oficinas locales del Ministerio.
            El delegado estudiantil Agustín Cedrés reafirmó el compromiso del Centro de Estudiantes de Derecho de apoyar y defender la Licenciatura en el ámbito de la Facultad de Derecho, señalando además que es necesario construir solidaridades de los estudiantes para la defensa de sus derechos.


 

Por mi parte, me referí a los vínculos importantes que existen entre el Derecho del Trabajo y  las Relaciones Laborales. En particular, tuve la oportunidad de afirmar: “La defensa de la Licenciatura de Relaciones Laborales debe constituir un objetivo de nuestra Facultad toda, y en especial de los estudiantes: debemos promover una Licenciatura fuerte y “desde” la Facultad de Derecho. Entendemos que esta obligación política debe asumirse además como un compromiso de la propia Universidad con la sociedad uruguaya”.
“En un País - concluímos - que hace de los Consejos de salarios, de la libertad sindical, de la negociación obrero-patronal libre y de la promoción del empleo una política de Estado, es deber de nuestra Facultad y de la Universidad impulsar con la mayor energía una carrera que tiene como principal función la formación para cumplir con estos objetivos que son en definitiva objetivos de todos, en nuestra calidad de ciudadanos trabajadores”.

jueves, 16 de abril de 2015

Galeano: los albañiles y el origen del mundo

Estuve atento en estos días a entrevistas, comentarios, opiniones en la red sobre el fallecimiento de Eduardo Galeano, una de las figuras que (más allá del futbol) ha permitido difundir el nombre de nuestro país en el mundo. Aún recuerdo cuando en el año 2000 entré en una librería en la ciudad italiana de Urbino y vi en un estante en destaque, tres tomos encuadernados en cuero: "Eduardo Galeano - Opera completa".
Y seguramente en todos los paises de este mundo globalizado podremos encontrar en una variedad imprevisible de idiomas, su reflexiones y sus cuentos.
Si debo destacar un comentario, debo referirme a Daniel Supervielle que en el programa radial de Emiliano Cotelo - En Pespectiva - habló de Galeano relatando diversas anécdotas del escritor. Refiriéndose a sus cuentos y citando a Gelman, Supervielle dijo: "supo ver la madera en el palito". Y es así. Una muestra de ello son los pequeños cuentos sobre el trabajo y los derechos de los trabajadores que la Fundación Electra recogió en uno de sus "Cuadernillos", que bien vale la pena adquirir antes que se agote.
Como muestra, va este cuento: hay mucha madera en la brevedad de la historia.

El origen del mundo

Hacía pocos años que había terminado la guerra española y la cruz y la espada reinaban sobre las ruinas de la República.
Uno de los vencidos, un obrero anarquista, recién salido de la cárcel, buscaba trabajo. En vano revolvía cielo y tierra. No había trabajo para un rojo. Todos le ponían mala cara, se encogían de hombros, le daban la espalda. Con nadie se entendía, nadie lo escuchaba. El vino era el único amigo que le quedaba. Por las noches, ante los platos vacíos, soportaba sin decir nada los reproches de su esposa beata, mujer de misa diaria, mientras el hijo, un niño pequeño, le recitaba el catecismo.
Mucho tiempo después, Josep Verdura, el hijo de aquel obrero maldito, me lo contó.
Me lo contó en Barcelona, cuando yo llegué al exilio.
Me lo contó: él era un niño desesperado, que quería salvar a su padre de la condenación eterna, pero el muy ateo, el muy tozudo, no entendía razones.
–Pero papá –preguntó Josep, llorando–. Si Dios no existe, ¿quién hizo el mundo?
Y el obrero, cabizbajo, casi en secreto, dijo:
–Tonto.
Dijo:
–Tonto. Al mundo lo hicimos nosotros, los albañiles.


lunes, 13 de abril de 2015

JORNADA DE RELACIONES LABORALES EN EL PARANINFO

El Centro de Estudiantes de Derecho pide dar la mayor difusión posible a esta Jornada que tendrá lugar el jueves próximo a las 18 horas en el Paraninfo. Participarán el Ministro de Trabajo Ernesto Murro, el Rector Markarian, el Director de Cinterfor OIT Enrique Deibe y el diputado y actual referente del SUNCA Oscar Andrade. Como se indica, se entregarán además certificados de asistencia.

Creo que de por sí es interesante la Jornada y al mismo tiempo es bueno que reafirmemos una militancia universitaria en torno a los temas que hacen al mundo de trabajo y de las relaciones laborales de nuestro país.

sábado, 11 de abril de 2015

Homenaje al Prof Barbagelata a un año de su desaparición

El viernes 24 de abril a partir de las 8,30 de la mañana se desarrollará en la Sala Maggiolo de la Facultad un acto de conmemoración del Prof. Héctor-Hugo Barbagelata fallecido el 13 de abril de 2014. Docentes, estudiantes y egresados de la Carrera de RRLL y de Derecho del Trabajo de Abogacía-Notariado están invitados. La entrada es libre y se entregarán certificados.
Programa:



jueves, 9 de abril de 2015

Presentación del Proyecto de Evaluación de Tareas y Propuesta de la Certificación de Competencias en la Industria de la Construcción


Tuvo lugar hoy en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social la presentación de los resultados finales del "Proyecto de Evaluación de Tareas y Propuesta de Certificación de Competencias de la Industria de la Construcción". El acto - al que asistieron numerosos invitados en representaciones de los distintos actores sociales - estuvo presidido por el Ministro Ernesto Murro, acompañado por el Director de Cinterfor-OIT, Enrique Deibe, el Presidente de la Cámara de la Construcción del Uruguay, Ignacio Otegui y el Secretario General del Sunca Ivan Hafliger.
Como se indicó en las diversas exposiciones, el proyecto pretende cumplir con los sguientes objetivos
Objetivos:
  • Favorecer la inserción laboral a través de la mejora de la calificación del trabajador constructor, a través del impulso de acciones de capacitación y formación. Concientizar sobre normas de Seguridad e Higiene Laboral. 
  • Fortalecer los centros de Formación Profesional de la Red UOCRA a lo largo de todo el país, para contar con lugares específicos y equipados para la capacitación en diversas especialidades. 
  • Promover la finalización de la escolaridad obligatoria y su posterior inserción laboral de jóvenes emprendedores en los diferentes estamentos de la cadena de valor de la industria.
 El proyecto cumplió además con las siguientes líneas de trabajo:
  1. Capacitación para un empleo calificado y seguro. En este sentido se desarrollan múltiples acciones, que incluyen: formación de trabajadores desocupados sin experiencia en el sector; formación de trabajadores ocupados; formación para futuros mandos medios; capacitación para socios cooperativistas; capacitación en prevención en salud y seguridad en el trabajo para trabajadores, delegados y colaboradores de obra y para docentes en los Centros de Formación Profesional; formación en unidades móviles de capacitación; capacitación en prevención de riesgos dirigida a empresarios, profesionales y técnicos de PyMES; desarrollo de jornadas de prevención y sensibilización sobre riesgos de trabajo para trabajadores desocupados y jefes de hogar en cooperativas de trabajo para la vivienda.
  2. Fortalecimiento de la Red de Centros de Formación para la Industria de la Construcción.Cada uno de los Centros que pertenece a la Red inicia una modernización de su gestión atendiendo las necesidades de los trabajadores y las demandas de la industria, para garantizar convocatoria y seguimiento de los participantes. Se realiza también un acondicionamiento de la infraestructura de los Centros que debe ser ejemplar en materia de salud y seguridad. Para que cuenten con los materiales y herramientas necesarias para el dictado de las acciones formativas propias de la industria de la construcción los CFP reciben equipamiento. Los docentes que dictan los cursos en las instituciones de la Red se capacitan de manera progresiva en el enfoque basado en competencias laborales. Se elaboran diseños curriculares, módulos y material didáctico de esta formación.
  3. Certificación de competencias laborales de los trabajadores. Todos aquellos trabajadores ocupados o desocupados que posean la experiencia requerida en su oficio pueden acceder al proceso de evaluación en base a las normas de competencia laboral para llegar a certificar sus competencias. Se evalúa al candidato preferentemente en un ambiente real de trabajo. También puede realizarse en un Centro Evaluador acreditado para tales fines. El IERIC, a través de su Departamento de certificación de Competencias Laborales, es el único organismo certificador para la Industria de la Construcción con capacidades de emitir juicio sobre las competencias laborales de los trabajadores, con el fin de perseguir el alcance de la calidad deseada en la industria.
  4. Orientación e intermediación laboral. Para vincular a los trabajadores desocupados con oportunidades reales de trabajo se acuerdan acciones conjuntas entre las oficinas de empleo municipales y un equipo de trabajo constituido por 11 articuladores. El articulador laboral acerca a los actores interesados en la dinámica del empleo y la formación de los trabajadores.


lunes, 6 de abril de 2015

CERTIFICACION DE COMPETENCIAS: UN NECESARIO DEBATE NACIONAL


Entre los objetivos de toda política de empleo comprometida con el actual contexto social y económico, deben figurar el aprendizaje continuo en un mundo productivo en continua evolución, la prevención de los cambios y su repercusión en las relaciones laborales, el estímulo de las inversiones en la formación. Para dar relevancia al cumplimiento de estos objetivos también se vuelve necesaria en el mundo contemporáneo la certificación de las competencias adquiridas, con la finalidad de su reconocimiento ya sea como expresión del crecimiento profesional,  ya sea para una mejor inserción en el empleo.
En Relaciones Laborales aprendemos que las competencias laborales son los conocimientos y destrezas que hacen a una persona competente para desarrollar su actividad laboral. ¿Pero como se miden esas competencias? Los estudios formales (primarios, secundarios y terciarios) han sido métodos tradicionales de medir en determinado momento los conocimientos (solo los conocimientos y no las destrezas) para calificar en determinadas actividades. La certificación de esos estudios no mide la evolución profesional de una persona y solo indica que en un momento dado de su existencia, esa persona adquirió los conocimientos suficientes para desempeñarse, por ejemplo, como médico o como abogado.
            Hoy por “certificación de competencias” entendemos algo más. El SNC (Sistema Nacional de Competencias) de México define la certificación por competencias como “el proceso a través del cual las personas demuestran por medio de evidencias, que cuentan, sin importar como los hayan adquirido, con los conocimientos, habilidades y destrezas necesarias para cumplir una función a un alto nivel de desempeño de acuerdo con lo definido en un Estándar de Competencia”
            La certificación de competencias cumple por lo tanto con diversos objetivos: certificar por ejemplo la calidad profesional de trabajadores, que no están calificados por los tradicionales sistema de enseñanza: pensemos en un trabajador sanitario, en esquiladores o alambradores, electricistas, que no tienen forma de demostrar su calidad profesional.
            En otros casos, la calificación de competencias refiere a comprobaciones para asegurar que cierto tipo de trabajos sean desempeñados por personas cuya idoneidad no merezca dudas,  como el caso de tareas vinculadas con la salud, la seguridad física o moral de terceros o las ejecutadas en trabajos que están evolucionando rápidamente y requieren el refrendo de estar confiados a profesionales competentes y formados ante los cambios.
            Es un debate para nuestro país aún novedoso, pero ineludible.
            En este debate, dos preguntas abren la discusión:
            ¿Quien – que institución, qué estructura – certifica las competencias? Podemos pensar en el Ministerio del Trabajo, en la Universidad, en órganos tripartitos como los Consejos de Salarios, etc.
¿En base a que criterios definimos los estándares de competencia definidos por el mercado laboral?
 Es lo que en doctrina se define como la “normalización” de competencias laborales, es decir qué “normas”, qué pautas deben preverse para certificar las competencias.
Pese a cierta prevención – especialmente desde las organizaciones sindicales sobre los sistemas de certificación de competencias – es evidente que ellas estimulan la educación/formación del trabajador, que es a nuestro juicio la única verdadera garantía de continuidad en empleos, que se van cada vez más transformando.
Por otra parte imaginamos que un sistema de certificación de competencias puede desarrollar nuevos espacios de diálogo social entre Estado, sindicatos y organizaciones de empleadores, para una mejor calidad del trabajo y un crecimiento compartido de la productividad. Para ello es necesario crear una mayor cultura del compromiso social en las relaciones laborales.
Estas reflexiones no son pura teoría. El Ministerio de Trabajo invita al acto que tendrá lugar el próximo jueves 9 de abril a las 12 horas en su sede, donde el Ministro Ernesto Murro y el Director de OIT/Cinterfor Enrique Deibe presentarán los resultados finales del “Proyecto de Evaluación de Tareas y Propuesta de Certificación de Compewtencias de la Industria de la Construcción”.
Considero que todos estamos invitados a concurrir y es importante que vayamos construyendo nuestras propias ideas y reflexiones en un debate que seguramente tendrá en este quinquenio alcance nacional.